TEA_06-36

En vida del autor se empezó a preparar el estreno en la primavera de 1936. Bajo la dirección del propio Lorca, comenzaron los ensayos con el Club Anfistora. Se alargaba el proceso, Lorca no encontraba los actores adecuados y los acontecimientos de julio de 1936 truncaron el proyecto. “Dentro de cuatro o cinco años existe un pozo en el que caeremos todos”, escribe Lorca. Que la obra está llena de presagios fatales es un hecho. Del mismo modo que, como El público, entra de lleno en el “teatro imposible” lorquiano.